Login to your account

Username *
Password *
Remember Me

Madrid, España
Un equipo de investigadores del Centro de Cognición y Toma de Decisiones de la HSE y de la Academia Médica del Estado Central de Rusia ha realizado un estudio sobre los trastornos del sueño, el estado de ánimo y la fatiga después de la COVID-19.

En su trabajo, publicado en la revista científica 'Neuroscience and Behavioral Psychology', los científicos apuntan que estos factores están interrelacionados y recomiendan un enfoque integral para tratar el problema con eficacia.

En el estudio participaron 119 pacientes hospitalizados con diagnósticos confirmados de COVID-19 que completaron cuatro cuestionarios sobre depresión, ansiedad, fatiga y trastornos del sueño. Los pacientes con puntuaciones superiores a la media en los resultados de los cuestionarios también se sometieron a entrevistas psiquiátricas.

La encuesta detectó altos niveles de trastornos del estado de ánimo y del sueño entre los participantes en el estudio. En total, el 28 por ciento de los encuestados informó de un deterioro del estado de ánimo, el 27 por ciento experimentó una alteración de la calidad de su sueño y el 73 por ciento sufrió fatiga.

Los niveles más altos de fatiga aumentaron el riesgo de ansiedad y depresión. Asimismo, el aumento de la ansiedad y el deterioro del estado de ánimo también afectaron a la vitalidad general.

Estos resultados indican que la depresión puede hacer que las personas que se han recuperado de la COVID-19 se sientan menos vigorosas en su vida diaria.

Un grupo de científicos halló una variante del VIH no identificada antes que es más virulenta de lo normal y ha circulado silenciosamente en Holanda en las últimas décadas.

El estudio difundido el jueves no es motivo de alarma: Los medicamentos contra el VIH han sido igual de eficaces en las personas portadoras del virus que mutó como en las demás contagiadas con la enfermedad, y la propagación de esa variante ha estado disminuyendo desde aproximadamente 2010. El subtipo fue descubierto en investigaciones efectuadas para entender mejor cómo el VIH continúa evolucionando.

Un nuevo estudio ha descubierto que la activación de ciertas neuronas de la amígdala central puede suprimir las respuestas inadecuadas al miedo. Una serie de microcircuitos neuronales regula la forma en la cual el miedo logra afectarnos.

Científicos de la Universidad de Berna y del Instituto Friedrich Miescher en Basilea han identificado un grupo de neuronas localizadas en la amígdala central que son capaces de regular nuestras respuestas al miedo. En determinadas condiciones, pueden reducir el impacto negativo del miedo, que lleva a distintos trastornos psicosociales, como por ejemplo la ansiedad.

  1. Popular
  2. Tendencias
  3. Comentarios