El 31 de mayo se celebra a nivel mundial el Día sin Tabaco, una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que se estableció en 1987. Esta fecha tiene como objetivo concienciar sobre los efectos nocivos y letales del consumo de tabaco y la exposición al humo de tabaco ajeno, y abogar por políticas eficaces para reducir su consumo.

Cada año, la OMS y sus asociados celebran el Día Mundial sin Tabaco promoviendo campañas y actividades en torno a un tema específico relacionado con el control del tabaco. Los temas pueden variar, pero todos buscan destacar diferentes aspectos del impacto del tabaco en la salud, la economía y el medio ambiente.

El Día Mundial sin Tabaco es una oportunidad para:

Resaltar los riesgos para la salud asociados con el consumo de tabaco y abogar por políticas eficaces para reducir su consumo.

Aumentar la conciencia sobre los peligros del tabaquismo y los beneficios de dejar de fumar.

Promover la lucha contra la epidemia de tabaquismo y las enfermedades y muertes prevenibles relacionadas con él.

Apoyar a los consumidores de tabaco en sus esfuerzos por dejar de fumar.

Resaltar las tácticas empleadas por las compañías tabacaleras para atraer a nuevos fumadores, especialmente jóvenes.

Algunas de las actividades que se llevan a cabo en este día incluyen campañas educativas, programas de cesación del tabaquismo, foros de discusión, conferencias y eventos comunitarios, todos diseñados para movilizar a las personas y las comunidades en la lucha contra el tabaco.