Aseguró que las acciones las hacen con el debido respeto a los derechos humanos, y en caso de que haya algún exceso, se corrige.
“Pero sencillamente, la República Dominicana y el servicio de salud dominicano no puede atender a dos países”, reiteró el mandatario.
Tras la crisis de Haití empeorarse, el Estado dominicano tomó medidas migratorias más estrictas, como fortalecimiento del patrullaje en la frontera, establecer informantes dentro de Haití, revisión del Plan Nacional de Regularización, más operativos en diferentes puntos del país, y solo proporcionar atención médica a inmigrantes ilegales en casos de emergencia.
Además, Abinader ha solicitado la ayuda de las grandes naciones, pero hasta ahora no ha habido reacción de la comunidad internacional.
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Nj productora