Login to your account

Username *
Password *
Remember Me

Mortífero atentado suicida en Afganistán deja al menos 55 muertos y más de un centenar de heridos en una mezquita chií en Kunduz, al noreste del país.

El ataque kamikaze se produce cinco días después de otro ataque en Kabul contra una mezquita reivindicado por la rama local del Dáesh, la llamada del Gran Jorasán.

Los talibanes anunciaron este martes que el mulá Mohammad Hasan Akhund, sancionado por la ONU, será el líder de su nuevo gobierno en Afganistán.

Por su parte, el cofundador del movimiento talibán, Abdul Ghani Baradar, será el líder adjunto, confirmó el portavoz principal del grupo, Zabihullah Mujahid, en una conferencia de prensa.

También, el vocero aclaró que el gobierno tendrá el carácter de “interino”, ya que no está completo, y tratarán de incluir a personas de otras partes del país.

Al menos cuatro aviones fletados para evacuar a varios cientos de personas que quieren huir de Afganistán luego de que el Talibán se hiciera del poder llevan días sin poder salir del país, indicaron las autoridades el domingo, y surgieron versiones contradictorias acerca de por qué los vuelos no han podido despegar.

Un funcionario afgano en el aeropuerto de la ciudad norteña de Mazar-e Sharif dijo que los que desean abordar los aviones son afganos, muchos de los cuales carecen de pasaportes o visas, y por lo tanto no pueden salir del país. Dijo que se habían ido del aeropuerto en lo que se resolvía la situación.

Sin embargo, Michael McCaul, el principal republicano de la Comisión de Asuntos Extranjeros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, dijo que en el grupo había estadounidenses y que estaban a bordo de los aviones, pero el Talibán no les permitía despegar, de hecho “manteniéndolos como rehenes”. No indicó de dónde provino esa información. Por el momento no fue posible reconciliar ambas versiones.

La euforia de los talibanes tras la retirada de las tropas estadounidense se puede tornar pronto en preocupación. Sus líderes han prometido anunciar la composición de un nuevo Gobierno en cuestión de días, tal vez horas, y este tendrá que lidiar, entre otros asuntos muy preocupantes, con la grave crisis económica que se les viene encima y con la amenaza de una guerra de guerrillas con algunos de los trece grupos étnico que hay en el país.

Está por ver si respetan su promesa de crear un Ejecutivo inclusivo, que de cabida tanto a las mujeres como a miembros de tribus no pastunes.

El presidente de EE.UU., Joe Biden, defendió este martes su decisión de no prolongar la presencia de las tropas en Afganistán más allá del 31 de agosto, ya que la opción era «retirarse o aumentar» el número de soldados.

El mandatario dio un discurso a la nación un día después de que las fuerzas estadounidenses pusieran punto final a su repliegue del país centroasiático, tras 20 años de guerra, el conflicto más largo de la historia de EE.UU.

Biden utilizó esta intervención para justificar los pasos adoptados, ante el aluvión de críticas que ha recibido por la gestión de la retirada y por haber «dejado atrás» a al menos un centenar de civiles estadounidenses en Afganistán.

El recién nombrado ministro interino de Educación Superior de Afganistán, Abdul Baqi Haqqani, ha confirmado este domingo que, bajo el gobierno talibán, las aulas estarán segregadas por sexos.

En una charla con autoridades de universidades públicas y privadas del país y con empleados del Ministerio de Educación Superior, Haqqani ha puntualizado que las niñas y jóvenes afganas tienen derecho a estudiar, «pero no pueden hacerlo en las mismas clases que los chicos», ha recogido Tolo News.

Al menos 110 personas han muerto, entre ellas 13 militares norteamericanos, en el doble atentado perpetrado por Estado Islámico durante las evacuaciones en el aeropuerto de Kabul, según ha podido confirmar la corresponsalía de la cadena Al Yazira, citando fuentes propias.

Asimismo, el medio ha recibido informaciones de que los militares estadounidenses que están contribuyendo a las tareas de la evacuación, ya en sus últimos días antes de la retirada final el 31 de agosto, se están preparando ante la posibilidad de nuevos atentados en medio de las caóticas extracciones.

De momento, cientos de personas han vuelto un día más a aglutinarse en el aeropuerto de la capital de Afganistán, Kabul, en busca de una salida del país a pesar del pánico provocado por el doble atentado.

Uno de los portavoces de los talibán, Suhail Shahin, ha insistido este martes en que «la ocupación» de Afganistán «tiene que acabar», al tiempo que ha tachado de «clara violación» una posible extensión del plazo límite inicial del 31 de agosto, que se valorará durante la jornada en una reunión del G7.

En una entrevista concedida a la cadena china CGTN, Shahin ha señalado que cualquier retraso en la retirada de las tropas extranjeras de Afganistán significaría una «disrupción» de los «planes de reconstrucción» de Afganistán.

Así, ha advertido de que, en caso de que esta «violación» se produzca, los líderes de los insurgentes decidirán «cómo proceder y qué hacer». En este sentido, ha urgido a Estados Unidos a «participar en la reconstrucción de Afganistán porque estuvieron involucrados en su destrucción».

  1. Popular
  2. Tendencias
  3. Comentarios