Los casos de COVID-19 se triplicaron en Estados Unidos en dos semanas en medio de una avalancha de desinformación sobre las vacunas, lo cual está presionando a los hospitales y extenuando a los médicos.
“Nuestro personal está frustrado”, comentó Chad Neilsen, director de prevención de infecciones en UF Health Jacksonville, un hospital de Florida que ha tenido que cancelar cirugías y otros procedimientos después de que el número de pacientes hospitalizados con COVID-19, en su mayoría no vacunados, aumentó a
134 en sus dos sucursales, frente a un mínimo de 16 a mediados de mayo.